domingo, 25 de diciembre de 2011

Crecer.

Recuerdo cuando era pequeña, cuando con una simple muñeca de trapo era feliz, cuando no existían complicaciones, el amor no existía y las amigas eran de verdad. La ilusión de levantarme la mañana de Reyes e ir corriendo a abrir mis regalos, de jugar con todos sin importar el sexo, el color o el físico. Cuando vivía en un mundo de color rosa, y creía en príncipes azules, en la cenicienta o la bella durmiente… Pero hace mucho tiempo que eso quedo atrás, crecí. Mi vida se lleno de responsabilidades, de complicaciones, de dolor. La inocencia se fue, dejándome sola ante un mundo que no comprendo, en el que no entiendo porque se lucha por la paz, en la que te cortan la libertad, en la que no puedes expresar aquello que sientes por miedo a que te censuren, donde se mata por puro placer. Crecí, ahora me enamoro y sufro por hacerlo. Ahora hay gente que no me habla porque no soy como ellos.
Ahora veo como se nos considera menos por ser mujeres. Ahora veo como cuesta encontrar un amigo que no te critique por detrás, que de verdad este para todo, veo como todos quieren un amigo pero pocos se esfuerzan en ser uno.
Ahora veo como la gente duerme en la calle y no tiene ni que comer, mientras otros viven en casas que muchos no podrían pagar ni aún juntando el dinero de toda su familia, durante toda la vida. Me gustaría poder retroceder, y recordar, aunque sea unos minutos, que se siente al tener como única preocupación que vestido le vas a poner a tu muñeca hoy.




sábado, 24 de diciembre de 2011

Haciendo de la decepción, una rutina...

No sé como empezar esto. No sé tampoco las palabras que pueden describir lo que siento. No sé como mirarte a los ojos, sin temor. No sé como acariciar tu mano, sin sentir un cosquilleo. No sé como pasar el tiempo sin ti pero contigo tampoco. No sé si debo ilusionarme con tu mirada o quizás deba estar abajo para cuando caiga una lágrima. No sé si creerme lo que siento o lo que quieres que sienta. No sé cómo actuar cuando paso por tu lado. No sé como mirarte, cómo sonreírte, cómo hablarte... No sé si debo seguir esperándote o por lo contrario, girar la cabeza y olvidarte, pero no sé como olvidarte, no sé como no extrañarte, no sé cómo acabar esto porque quizás no quiero que acabe. No sé cómo pintar mis sueños contigo, ni como manejarlos para no vivir de ellos. No quiero recordar momentos a tu lado por si una sonrisa se me escapa. No sé como hacer que esa sonrisa se camufle cuando te veo. No sé si reírme cuando me tocas o llorar porque no lo haces como cuando estamos solos. No sé si en realidad te importa ella o te importan los demás. No sé cómo engañar a mi corazón, y convencer a mi alma de que no te conozco. No sé como empezar a dejar de sentir. No sé cómo mirarme al espejo sin ver tus manos en mi cintura. No puedo dejar de imaginar lo que haría a tu lado. No sé cómo hacer que sientas algo de esto. No sé cómo besarte, cómo acariciarte. No sé cómo seguir con esto... Me das y me quitas como si fuera un niño pequeño. Hoy me sonríes, mañana ni me miras. No sé cómo dejar de querer estar contigo SIEMPRE! No sé cómo quitarme las ganas de besarte cada momento. No sé cómo deshacerme de la ansiedad que me recorre cuando no me miras, cuando te busco y no te encuentro, cuando te encuentro y tú no me buscas. No sé cómo despejar tu mirada de mi mente...el sabor de tus besos de mis labios, el calor de tus abrazos sobre mi cuerpo. No sé cómo hacer para dejar de pensar en ti... Tocada y hundida... 


domingo, 18 de diciembre de 2011

.

Dicen que uno no sabe lo que tiene hasta que lo pierde, dicen que querer es poder,dicen que a la tercera va la vencida, dicen que lo imposible es atractivo, dicen que quien no arriesga no gana, dicen que el que tuvo retuvo, dicen que una mirada vale más que mil palabras, dicen que de todo se aprende dicen que todo lo malo tiene algo bueno...todas las cosas tienen un final, aunque duela aunque no estemos preparados, sabemos que todo antes o después se acaba...pero puedo decir que todo absolutamente todo ha merecido la pena. A veces nos empeñamos en empezar cosas que están destinadas al fracaso, pero lo importante no es el final de las cosas, a veces tardamos en entender que lo importante no es el destino sino el trayecto, el viaje. La vida esta llena de momentos en los que hay que pararse a pensar, porque la vida no es fácil y hay que tomar decisiones, elegir… pero a veces cuando alguien se arrepiente de verdad es bonito saber perdonar saber que nadie es perfecto que nos podemos equivocar y saber dar una oportunidad pero tampoco ai que ser ingenuo, da una y no mas! pues quien te daña una vez lo puede volver ha hacer muchas veces mas...